Antes de empezar, avisar que la ruta es
difícil.
El lugar de salida es el Pontarron, mas
o menos debajo del puente de la autovía en la localidad de Oriñon.
Los primeros kilómetros son por la
autovía del agua, así que ninguna complicación. Nos aprovisionamos
de agua y después de pasar Balbacienta nos desviamos hacia la
derecha por una pista (algunas rampas durillas). Seguimos seguimos y
seguimos hasta llegar a un punto donde ya la pista se cierra de tal
forma que es imposible la marcha. Con resignación damos media vuelta
y por casualidad descubrimos una senda de ganado preciosa, que nos va
a llevar a la carretera comarcal para poder llegar al alto de Jaya
(400 m).
Hacemos un alto en la ermita del Ranero
y seguimos por la carretera comarcal.
Llegados a la “granja”, nos
desviamos hacia la izquierda y seguimos la pista que nos llevará al
alto “cerredo” 620 m. Desde aquí todo es bajada hasta Castro. El
descenso es impresionante y nos emocionamos tanto que nos pasamos el
desvío para bajar a “Allendelagua”. Deshacemos el camino para
coger el desvío y el camino se torna en una pendiente durisima y mas
abajo en una autentica trialera que incluso nos obliga a bajarnos de
la bici (incluso siendo pista).
Llegados al final del descenso solo nos
queda coger la ruta del “camino de Santiago” hasta llegar a
Oriñon. Parte de este tramo de la ruta transcurre por la costa y el
sendero en esta ocasión si que merece la pena.
Después de finalizar todos los
senderos posibles y llegar a Arenillas solo nos queda coger la
carretera nacional hasta llegar otra vez al Pontarron.
Ruta complicada tanto en las primeras
rampas de ascenso como en las ultimas del descenso.